TRÍPTICO DE IN-MATERIALIDADES

a María Paulina Briones 

en quito arden los cipreses  

quito es una brasa 
que entibia los vientos 

abre 
abre 
la ventana 

mira el metal que suplica 

no me seas frágil 
corazón 

en esta hora 
de prófugos 

cuerpo-a-cuerpo
con mi cresta blanca 
mis pies sucios 
asediada de oráculos
y traducciones 

declaro agonía 
al nombre 

que en tu lengua 
no sea yo a quien llames 

extingue el rasgo 

al fin 
el incendio 
purifica 

lejos de los cipreses 

quito 
quito 
ceniza-de-dios

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desvestirme de esta carne de gallina vieja, de estos huesos tirados al azar. cuando me asomo a tu pupila no reconozco a la hembra sacerdote que fingía demencia en sus palacios de vino, ni a la sierva de los altos hombres que masticaban hierbas al amanecer. quiéreme, te digo, pero aun así divides la cama en continentes, abrazo el exilio, leo palmas de piratas para descifrar en ellas mis hijas. 

alzo la sábana, remuevo el calzón, adhiero, dedo a dedo, los cristales. 

mansa cavidad, ¿a quien parirás después?

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píntame 
del azul 
de tus membranas

mirlo-macho-hibrido

extiende 
mi virtud 
hasta esta orilla 

bebe 
plasma 
del ombligo 
de muñecas  
que rompen
su estela 
en habitaciones 
rosadas

tu signo 
ha de esperar

cazador de moscas 

mientras tanto 
derrite la pureza